Resumen:
El propósito general de este trabajo es compartir algunas de las reflexiones sobre los usos y potencialidades de la corporalidad y la performance en las investigaciones etnográficas que venimos realizando en el marco del Equipo de Antropología del Cuerpo y la Performance de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Especialmente focalizaremos en el potencial epistemológico y político que poseen las metodologías que incorporan talleres performáticos en las investigaciones colaborativas, y plantearemos también algunos ejemplos sobre sus usos en las prácticas de divulgación y enseñanza antropológica. Especialmente desde los años setenta, a partir de los trabajos pioneros del sociólogo colombiano Fals Borda (1994) y el pedagogo brasileño Paulo Freire (1982), en las ciencias sociales latinoamericanas se han generado diferentes experiencias de investigación participativa, colaborativa o de investigación-acción, cuyo rasgo compartido es la participación activa de los ?sujetos investigados? en las problemáticas abordadas. En estas experiencias, los investigadores académicos y los miembros de los grupos intentar coordinar y consensuar conjuntamente las problemáticas a investigar, la obtención de la información, su interpretación y análisis y, en algunos casos también, la búsqueda de posibles soluciones para los problemas que originaron la investigación (Lassiter 2005; Rappaport y Pacho 2005; Marcus 2008; Katzer y Samprón 2011). De este modo, aquellos que en las investigaciones etnográficas tradicionales eran considerados "informantes", pasan a ser ?consultores? o ?colaboradores? (Lassiter 2005), o también, como sostiene Rapapport (2007), ?co-teorizadores?; asimismo, en estos complejos procesos, la investigación etnográfica tienden a entrelazarse con la acción política e incluso también con distintas experiencias pedagógicas. Estos procesos investigativos suelen combinar diversos métodos y/o técnicas, por un lado, los más conocidos y habituales, basados fundamentalmente en la palabra, como los grupos de discusión, la elaboración de narrativas, auto-etnografías y autobiografías, la realización conjunta de encuestas y entrevistas y, en general, diversos modos de escrituras en coautorías. Por otra parte, también se utilizan cada vez más diversos modos de producción visual y audiovisual colaborativa, a partir de la realización de registros fotográficos y fílmicos; estas modalidades poseen ya una importante tradición en la antropología visual, pues desde los años sesenta se viene incorporando experiencias de realización y edición compartidas con los sujetos fílmicos, en pos de crear una antropología más dialógica y polifónica (Rouch 1975; Ginsburg 1991; Turner 1992; Moya y Álvarez 2006; Carelli 2011; Torres Agüero 2013). Más recientemente, también se ha comenzado a trabajar en la co-construcción de cartografías sociales, que incluyen diversos modos de expresión plástica, murales o museos comunitarios, a partir de diversos objetos significativos (Aichino et al 2012; Montoya et al. 2014; Iconoclasistas 2018). No obstante, son menos aún las experiencias que incorporan prácticas performáticas basadas en la exploración de los movimientos corporales, las gestualidades y las sonoridades como una vía alternativa para la producción colectiva de conocimientos y la generación de reflexividades; así, en América Latina, podemos señalar experiencias más recientes realizadas en Colombia (Riaño Alcalá 2005; Arboleda Gómez 2009) y en Brasil (Araujo 2008). Con la intención de contribuir al debate sobre el uso de estas metodologías en las investigaciones etnográficas, en primer lugar, situaremos las principales discusiones que nos llevaron a problematizar los modos en que las corporalidades intervienen en la generación de saberes y reflexividades, así como de agencias y transformaciones micropolíticas. En segundo lugar, reseñaremos un proceso de investigación participativa que incluyó talleres performáticos, sobre las memorias de las danzas, músicas y juegos de los pueblos originarios tobas o qom de la provincia de Formosa. En este proceso, realizado entre 2010 y 2014, participaron diferentes miembros de las comunidades (primero un grupo de mujeres adultas artesanas, luego jóvenes estudiantes, y finalmente, maestros y maestras bilingües), junto con antropólogas de nuestro Equipo. Asimismo, presentaremos una estrategia metodológica emergente de esta investigación colaborativa: Pasos del pasado. Las performances participativas como metodología de investigación de las memorias culturales, la cual hemos puesto en práctica en diferentes congresos académicos y cursos universitarios. Como podrá apreciarse, la pregunta teórico-práctica que ha venido atravesando estas diferentes reflexiones y ensayos metodológicos es: ¿qué aportarían estos otros modos de saber-hacer, estas otras reflexividades más corporizadas, a nuestras metodologías de investigación etnográfica, prácticas docentes y de divulgación? Nuestra provisoria respuesta es la siguiente hipótesis, que indagamos en el marco de nuestro actual proyecto de investigación colectivo:En términos epistemológicos, promueven una diversificación y ampliación de las formas de conocimiento y reflexividad, al profundizar en los distintos modos senso-perceptivos y afectivos inherentes a todo proceso cognoscente, pero que han tendido a invisibilizarse en los formatos académicos tradicionales; y en términos políticos, favorecen la emergencia de modalidades participativas que involucran relaciones más simétricas así como un mayor grado de agencia individual y colectiva (Citro y Equipo 2017).